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El Parlamento de Cantabria ha acogido la presentación oficial del libro “El poeta que hablaba en colores” y la exposición retrospectiva del pintor cántabro Julio de Pablo, que ya puede disfrutarse en el Patio central de la sede legislativa, en el antiguo Hospital de San Rafael de la calle alta de Santander. Durante el acto de presentación, la presidenta de la cámara legislativa, Dolores Gorostiaga, resaltó “el compromiso permanente del Parlamento con la cultura de esta región al sumarse y colaborar con los objetivos marcados por la Fundación Julio de Pablo” .

Además de Gorostiaga, en el acto han participado la Alcaldesa de Camargo, Esther Bolado, municipio de nacimiento de Julio de Pablo;  el presidente de la Fundación Julio de Pablo, José Ramón Rodríguez Altónaga y Luis Alberto Salcines, comisario de la exposición y coautor de libro. Tras la concluir las intervenciones, el presidente de la Fundación procedió al acto de donación al Parlamento de Cantabria de la obra ‘Autorretrato’ del propio artista.

La Presidenta agradeció la donación que, a su juicio, ”junto a la obra de otros grandes creadores cántabros, incrementa y engrandece el patrimonio artístico y cultural de esta cámara legislativa, es decir, el patrimonio de todos y cada uno de los cántabros y cantabras”.

Gorostiaga recordó que, si bien el proyecto “había quedado pendiente de la legislatura anterior, lo cogí con entusiasmo y vi muy conveniente ofrecer este antiguo Palacio de San Rafael, hoy sede de la voluntad de todos los cántabros,  como espacio para exponer lo mejor de la obra y de la vida del gran pintor cántabro Julio de Pablo”.

“A pesar de ir contracorriente, gracias a su obra, conservada y divulgada por la Fundación que lleva su nombre, el pintor nacido en Revilla de Camargo se ha ganado un importante lugar en la historia contemporánea del arte”, ha señalado la presidenta, parta añadir que es fácilmente perceptible “que Julio de Pablo vivió adelantado a su época, y que son generaciones más cercanas y actuales de creadores los que pueden beber de un arte tan personal, con sus mariposas abstractas, coloreadas de rojos y amarillos, de grises, blancos y negros”.

La presidenta del Parlamento ha añadido que la fundación, presidida por Rodríguez Altónaga, “ha sido y es un acierto, porque ha velado desde el fallecimiento del pintor para que alguien que hablaba tan magistralmente en colores no caiga jamás en el olvido. Es de agradecer que entidades privadas sin ánimo de lucro como esta fundación contribuyan a la labor de protección de nuestro patrimonio cultural que realiza la administración autonómica”.