Noticias

Discurso del presidente del Parlamento.

-    Sr. Presidente del Gobierno,

-      Sres.  Diputados/as del Parlamento de Cantabria,

-    Sr. Presidente del CERMI (Roberto Álvarez Sánchez),

-      Sres. Responsables y Miembros de las Federaciones y Asociaciones integradas en el CERMI,

-      Autoridades que nos acompañáis en este Acto,

-      Personas con discapacidad, familiares, amigos todos:

Bienvenidos al Parlamento de Cantabria, la casa de todos los cántabros, y muy especialmente vuestra casa, la de las personas que estáis afectadas por algún tipo de discapacidad, y la de vuestros familiares y amigos.

Para el Parlamento es una satisfacción acoger de nuevo este acto, pues con él estáis reconociendo a esta institución como la  garante de los derechos y libertades de todos los ciudadanos. En vuestro caso, además, cobra un especial significado, pues aquí se ha de garantizar, ante todo, el valor superior de la igualdad, el derecho a ser iguales, que es el que constituye vuestra más radical exigencia.

En 1992 la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el día tres de diciembre de cada año como el Día Internacional de las Personas con Discapacidad. La jornada tiene por objeto sensibilizar a la opinión pública sobre las cuestiones relacionadas con la discapacidad y movilizar el apoyo a la dignidad, los derechos y  el bienestar de las personas con discapacidad.

 Promover medidas eficaces para la prevención de la discapacidad, fomentar la plena participación e integración de las personas con discapacidad en la sociedad, lograr la efectiva igualdad de oportunidades, reivindicar su derecho a una educación de calidad, a un trabajo digno  y, en síntesis, a una mejora en su calidad de vida, constituyen otros tantos objetivos de esta jornada.

    Este día debe servir también para que todos hagamos un balance anual de nuestras aportaciones en pro de la discapacidad y de los objetivos y retos que nos proponemos para el futuro.

-    Desde el Parlamento hemos sido especialmente sensibles hacia vuestra situación y derechos.

 Quiero destacar algunas de las iniciativas que hemos llevado a cabo en el último año.

· La celebración de la Constitución en el 2011 contó con la implicación y concurso de vuestras Asociaciones y la centramos en el reconocimiento hacia las personas con discapacidad.

Tuvimos ocasión de conocer en aquel solemne acto, de vuestra viva voz, las justas reivindicaciones que nos planteasteis.

 · Por otro lado, este Parlamento ha protagonizado un avance ciertamente singular, y con el acuerdo de todos los grupos parlamentarios: la creación de la Comisión Parlamentaria  sobre Discapacidad.

El Parlamento de Cantabria se convierte así en uno de los pocos que cuenta con una Comisión de esta naturaleza, con el objetivo de analizar la situación de las Personas con Discapacidad en nuestra Comunidad y defender sus derechos.

La citada Comisión constituye un punto de encuentro y diálogo permanentes con los representantes del CERMI, y su hoja de ruta se orienta a dar cumplimiento y hacer el adecuado seguimiento de la implantación de la Convención Internacional de la ONU  sobre los derechos de las Personas con discapacidad.

·  Otro hito importante que muestra la preocupación del Parlamento por la discapacidad lo ha constituido la organización y desarrollo en su sede, en colaboración con la Universidad de Cantabria, del Curso de Verano sobre Avances en Intervención sobre Discapacidad.

    En él participaron expertos universitarios, representantes de algunas de vuestras Asociaciones y especialistas de los grupos de trabajo de los Centros. Se lograron así interesantes avances en los contenidos teóricos y en los aspectos prácticos que os afectan.

- En cuanto al balance de la Actuación de las Asociaciones integradas en el CERMI, no puedo por menos de destacar una muy singular y  reciente iniciativa, vinculada a lo que la institución parlamentaria representa. Me estoy refiriendo al Manifiesto de Cádiz por la Plena Ciudadanía, proclamado por las Personas con Discapacidad Intelectual, el pasado 19 de octubre, con ocasión del Bicentenario de la Pepa.

En él plantean sus múltiples denuncias y demandas. Pero si hubiera de priorizar una exigencia concreta, creo que ésta sería la de la PARTICIPACIÓN. Exigen participar, tener voz y capacidad de decisión en los asuntos que les afectan.

 Quieren demostrar de lo que realmente son capaces como autogestores de sus propias entidades y como formadores de sus propios colectivos. En este último caso, por ej., la experiencia viene demostrando que los formadores con discapacidad son capaces de prepararse adecuadamente, pueden trasmitir perfectamente la información a sus compañeros y que éstos los comprenden  mejor y los aprecian más que a otros formadores profesionales.

    Comparto, asimismo, con el Manifiesto, que los grandes principios y derechos, como el de la Igualdad de Oportunidades, no se queden sólo en el papel, sino que se desarrollen en normas  y que repercutan de manera efectiva en la situación de vuestros colectivos. Que pasen al ámbito de los compromisos de las administraciones y de los poderes públicos, y que todos nos comprometamos a llevarlos adelante.

La igualdad de oportunidades ha de concretarse, pues, en medidas específicas en distintas áreas:

 · En la de la Educación y Formación,

- con el asesoramiento a las familias de los alumnos con discapacidad,

-  con una atención educativa que favorezca el desarrollo de sus habilidades y capacidades,

- con la adecuada transición entre los niveles y etapas educativas,

-  con su promoción en la Formación Profesional y, finalmente,

- con la accesibilidad universal a la educación superior, de modo que los discapacitados universitarios no tengan otras dificultades que las propias de la carrera elegida.

· En el área de la Inserción Laboral, con acceso al empleo, no solo al protegido, sino principalmente al empleo abierto y ordinario. Las personas discapacitadas podrán integrarse así plenamente con el resto de los trabajadores, y evitar su segregación y exclusión social.

Corren tiempos difíciles y en vuestros colectivos resulta imprescindible, más que en ningún otro, favorecer la formación innovadora, el desarrollo tecnológico y el apoyo al autoempleo.

Debo concluir y lo hago con un sincero reconocimiento hacia todas las personas con discapacidad y a vuestras familias. Todo lo que habéis conseguido ha sido a base de coraje y de un enorme esfuerzo y es obligado que, en nombre del Parlamento, os lo reconozca públicamente.

 

Y un especial agradecimiento al CERMI, a las  Asociaciones en él integradas y a sus dirigentes y empleados, por la generosa y permanente lucha en pro de las personas con discapacidad. Es desde vuestras asociaciones desde las que mejor se conoce la situación de estas personas y desde las que mejor se pueden defender sus derechos.

Gracias a todos.