Noticias

El Parlamento de Cantabria ha acogido hoy la celebración del Día del Docente, un acto de reconocimiento a los maestros y profesores que se han jubilado este año de las aulas tras una trayectoria docente destacada organizado por la Consejería de Educación del Gobierno de Cantabria.

El acto ha estado protagonizado por cinco de los docentes jubilados y ha contado con la asistencia del presidente del Gobierno de Cantabria, Miguel Ángel Revilla; la vicepresidenta del Parlamento, Emilia Aguirre; la consejera de Educación y Formación Profesional, Marina Lombó; otros miembros del Gobierno, los miembros de la Mesa y portavoces y diputados de los grupos parlamentarios y la alcaldesa de Santander.

“Necesitamos buenos maestros comprometidos con la educación, que es la pieza fundamental de todo, de nuestra manera de percibir el mundo”, ha reivindicado Emilia Aguirre en su intervención de bienvenida. La vicepresidenta del Parlamento ha subrayado la importancia “del ejemplo, el consejo, el abrir los ojos al conocimiento, el ayudar a descubrir el saber”. “Cuántas vocaciones, cuántos profesionales, cuántas vidas son lo que son gracias a sus maestros” -ha añadido- “ejercéis un servicio público imprescindible”.

Aguirre ha considerado que las escuelas, los manuales de estudio y las técnicas didácticas han cambiado mucho. “Las pizarras digitales hacen viejos a los encerados de tiza; cambian los cuadernos, se jubila el papel y los lápices, y llegan las tabletas y los portátiles” -ha evocado- “pero lo que no cambia es el maestro que sigue haciendo lo mismo de siempre: enseñar”.

Aguirre ha destacado que la misión de los maestros no es solo formar a jóvenes educados en el conocimiento, sino también en la sensibilidad “que es el ingrediente del que están hechas las buenas personas”. “Jóvenes dispuestos a tomar las riendas de la ciencia, de las instituciones, de la sanidad y la propia educación, para contribuir a hacer una sociedad y un mundo mejor”, ha pedido, porque “queda mucho por reparar, en esta sociedad que se fragmenta, que se enfrenta y se pelea, que hace daño al planeta”.

La vicepresidenta ha resaltado también que ser maestro es una vocación especialmente en aquellos que ejercen en entornos rurales, “en las escuelas de los pueblos donde, aunque cada vez hay menos niños y niñas, no les puede faltar la educación”.

Por último, ha felicitado a los veteranos docentes “que han agotado una intensa trayectoria laboral dedicada a los niños y niñas”.